Ir al contenido principal

Día N

Durante la pandemia del coronavirus 2020 escribo textos esperando que la ansiedad explote en palabras y la creatividad dé vida en el caos.

Mi boca relata los aprendizajes en terapia, mi esposo escucha atento mientras un sartén derrite mantequilla, salivo y recuerdo: estoy a dieta.

Las tareas de la universidad, las noticias y ajustes laborales no me permiten sentarme a escribir, pero observo la agridulce situación.

Aún no estoy en cuarentena, me toca ir a trabajar. En el camino experimento esta "sana" distancia que pesa al no poder abrazar a mis padres y aquellos que quiero ¡Qué irónico! El contacto físico y yo hemos librado batallas con balas de ansiedad.

Añoro tus abrazos, tu risa, tu voz. Hoy estarías cumpliendo 80 años, pero decidiste no festejarlos en esta Tierra. Tita amada, te celebro en este silencio que evoca más de mil palabras. Te celebro en este escenario de contingencia de salud mundial. Te celebro es este espacio de amor por mí que cada día  voy construyendo más.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Orgasmo/poema

En cada orgasmo                          un poema.

Se humedecen

Se humedecen, las calles, los techos, las pisadas. Se humedecen, las sábanas, los pies, las miradas. Se humedecen, las manías, los gestos, las risas. Se humedecen, las dudas, los sueños, las ideas. Durante esta tormenta, se me humedece la vida... y el alma. Poema escrito durante la tormenta tropical Cristóbal

Desequilibrio

  Sumergirse en el dolor de las sombras, en la oscuridad plena, ahí donde habitan los miedos, donde la respiración se entrecorta   y huele a pánico.   Mirar de nuevo los monstruos, las heridas, lo que dejaste podrir debajo de la alfombra.   Tomar el desequilibrio   y brincar, impulsarse en el aire, sin contener el mareo.   Recordarse alma, Sacudir el cuerpo Enraizarse en el vuelo.   Dejar el control, descansar, observar...            Navegar.